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Mostrando entradas de mayo, 2011

Capítulo XXXI: Efectos de la presión

Ais.... por fin un reto que vale la pena. Ayer hizo exactamente un mes desde que empecé el curso y ya comienzo a notar sensiblemente los efectos de la presión. Los conocimientos se acumulan más y más y empiezo a ver que unos buenos apuntes no son aquellos que te cuentan todo el temario de pe a pa, si no que son los que engloban conceptos clave, sencillos, directos y sin repeticiones para no confundirse. Como siempre, en muchas ocasiones parece que la dinámica la marcan aquellos que preguntan que generalmente son los que más saben o que tienen alguna base definida. Aun así, yo seguiré adaptándome y conseguiré salir airoso. Ya he recibido los resultados de mi primer examen. Aprobado por los pelos, como siempre. me salvaron las preguntas tipo test. De todas formas he comprendido bien mis fallos y, por lo general, fueron fallos producto de la tensión del examen que me llevaron a errores tontos. Hoy vino un inspector de la Xunta para preguntarnos sobre el curso. Si se ajustaban los conten

Capítulo XXX: El deseado descanso

Por fin es sábado. Estaba deseando este día con ansia. En las últimas horas de ayer estaba más zombie que otra cosa. Tuve la suerte de que Sergio me acercó ayer tambien a casa... Cuando llegué, aun cansado... pensaba en que todavía me quedaban cosas por hacer. Ir a correr, ir al Alcampo para ver el precio del libro: Guitarra para Dummies y comprar unas cervezas para celebrar que era viernes. Lo de estudiar lo dejaría para hoy, ayer no estaba para esas cosas. También pensaba en la idea de que al tomarme unas cervezas mañana estaría medio de resaquilla pero me daba igual, ya me encargaría de eso cuando pasara... Sorprendentemente, hoy me desperté generoso conmigo mismo y he decidido cumplir con mis espectativas. Me desperté, ordené un poco la habitación para así tenerla como "templo de estudio" y me puse al lio ya que eso de estudiar en el salón con cierto olor a humo residual no me motiva demasiado. Necesitaba una zona diferente, libre de humo y sobre todo libre de interrupcio

Capítulo XXIX: Matojo de nervios

Me entra como un vértigo especial al intentar adelantarme a los acontecimientos de todo lo que está pasando. Un vértigo sano, claro... pero sigue siendo vértigo. El jueves o el viernes llamaron a Piro para decirle que nos habían asignado un local de ensayo en Valladares, justo al lado de la casa del Rober. Después de tantos años desde que nos anotamos y con la formación casi disuelta por fin nos han asignado un local de ensayo y cómo no... había que aprovechar la oportunidad o rechazarla para siempre. Yo siempre estoy dispuesto a ensayar mientras tenga tiempo para hacerlo, los horarios eran compatibles con el curso y le dije que sí, claro. En un principio yo pensaba que eso iba por turnos, que un día iríamos y que no volveríamos a ir en un tiempo... pero resulta que no es así si no que todos los martes de 18:00 a 20:00 tenemos todo un local de ensayo para nosotros. ¡Un local de ensayo con horarios planificados! Me parece genial en muchos aspectos. Ya no tendremos que depender de la c